1. Materiales potencialmente peligrosos.

Se debe evitar la utilización de asbestos y plomo porque son sustancias peligrosas para la salud.

Se deben evitar los materiales y productos de construcción que, en su fase de fabricación, colocación en obra, uso... (digamos en su ciclo de vida) utilizan CFCs, HCFCs o halones, porque son origen de emisiones al aire que dañan la atmósfera.

2. Minimización de residuos

Para minimizar los residuos de construcción originados sobre todo en la demolición, el peso de los elementos constructivos que forman el edificio debe ser menor de 750 Kg/m2 o 250 Kg/m3. (si no son reciclables)

3. Reciclabilidad de los residuos

Se favorecerá la reciclabilidad y la valorarización, si es posible separar fácilmente los distintos materiales que conforman los elementos. Se favorecerán aquellas soluciones constructivas que resuelvan las distintas exigencias por medio de la yuxtaposición de capas no adheridas.