La aportación substancial del muro de fachada a las exigencias derivadas del medio ambiente es la capacidad de reducir el consumo energético necesario para el funcionamiento del edificio a lo largo de su vida. La disminución de este consumo reduce el impacto ambiental que causa el aumento de la temperatura global del planeta, la contaminación del aire, y el consumo de energías no renovables.

El objetivo principal del estudio es el análisis comparado de varias soluciones constructivas de muro de fachada, que reducen el consumo habitual de energía del edificio, para conocer las que originan menos residuos de demolición.

En primer lugar definiremos una solución constructiva convencional, en la que mejoraremos sus prestaciones de aislamiento térmico a base de incrementar el espesor de este material. Esta solución será la que definirá el valor de la K de referencia a alcanzar por las soluciones alternativas que proponemos. A continuación, compararemos los residuos que originan estas soluciones.

El estudio se estructura de la siguiente forma:

1. Evaluación del coeficiente de transmisión térmica de un muro de fachada, que tomaremos como referencia.
2. Definición de otras soluciones alternativas de muro que tienen prestaciones similares.
3. Análisis de las ventajas e inconvenientes de éstas.

El análisis de los residuos que originan las soluciones constructivas de fachada que se proponen solamente tiene sentido si comparamos soluciones con prestaciones similares. En el muro de fachada no portante, el parámetro que hemos elegido es el del coeficiente de transmisión térmica. Así, los muros que analizamos satisfacen las mismas prestaciones de aislamiento térmico.

La referencia inicial que tomaremos para definir el valor del coeficiente de transmisión térmica del muro es el del valor que alcanza en el muro de fachada convencional de obra de fábrica de ladrillo. Este muro está formado por dos hojas entre las se dispone una cámara de aire, de unos 10 cm. de espesor. Habitualmente, el material de aislamiento ocupa solamente una parte de la cámara.

Como que nuestro objetivo es mejorar el aislamiento térmico del muro para reducir el consumo de energía, consideraremos que el material aislante ocupa todo el espesor de la cámara. De esta forma, alcanzaremos en el muro de referencia un coeficiente de transmisión térmica K= 0.25 (kcal/h m2 ºC). Este valor supone, a largo plazo, una significativa reducción del consumo energético y, por lo tanto, del impacto ambiental.

Sin embargo, dado que el muro de fachada convencional es una solución que dificulta la valorización de los residuos que se originan en la demolición, propondremos otras soluciones alternativas de muro de fachada más fácilmente reciclables. Estas soluciones tienen en común unas prestaciones de aislamiento térmico semejantes a la de referencia.

Las soluciones alternativas que proponemos al muro de fachada convencional son tres ejemplos característicos de dos estrategias de diseño de los cerramientos de fachada en la construcción contemporánea:

• Muros ligeros de poco espesor y peso.
• Muros más gruesos y pesados.

Para realizar un análisis más detallado, definiremos unas soluciones concretas de cada tipo de muro de fachada que cumplen el valor de K que proponíamos. A continuación evaluaremos el peso de cada una de ellas, para conocer los residuos que se originan en la demolición.

1. Muro ligero: Panel sandwich metálico.

Dos láminas de acero con aislamiento de poliuretano incorporado.

Peso por m2.= 14 Kg./m2. Espesor del aislamiento = 11 cm.

2. Muros pesados:

a) Muro homogéneo de baja densidad.
Muro de bloque de baja densidad y conductividad térmica, enlucido de cemento por ambas caras.
Peso por m2 = 565 Kg. Espesor del muro = 65 cm.

b) Muro de fachada ventilada:
Hoja exterior de plancha de acero, cámara de aire ventilada, aislamiento de fibra de vidrio y pared interior de obra de fábrica.
Peso por m2 = 259 Kg. Espesor del aislamiento = 10 cm.

(Véase Figura 1. Detalle de las soluciones constructivas de muro de fachada.)

Es evidente que la alternativa del muro homogéneo es la menos recomendable. El muro alcanza un coeficiente de transmisión térmica semejante al de las otras soluciones estudiadas, solamente cuando su espesor y peso es más del doble que el de la fachada ventilada y cuarenta veces el peso del panel sandwich y, en definitiva, los residuos que se originarán serán muy superiores.

Figura 1

1. FACHADA LIGERA:

1. Panel sandwich de acero

2. FACHADA VENTILADA

Placa de acero Soporte de acero galvanizado Aislamiento de lana mineral Pared de fábrica de ladrillo hueco Enlucido de mortero mixto